Herramientas y Repuestos para el Ciclismo: Qué Empacar y Cuándo

Es inevitable tener que lidiar con un neumático pinchado o un problema mecánico cuando estás en la bicicleta. Es frustrante, pero aún más si no estás preparado para lidiar con ello. Empacar las herramientas adecuadas y educarse a sí mismo sobre cómo utilizarlas, hará que este trabajo sea más fácil y rápido.

Tener un problema mecánico con tu bicicleta es menos común que tener un neumático pinchado, pero puede afectar tu aventura en un grado mucho mayor. Manubrios sueltos, la barra del sillín caída, frenos haciendo mal contacto, estos son sólo algunos de los problemas más comunes y que una multiherramienta o una pequeña gama de piezas de repuesto podrán solucionar en un abrir y cerrar de ojos.

La prevención es lo primero

En la vida no hay garantías, por lo que aún no existe una solución definitiva para evitar un temido pinchazo o una misteriosa avería en un viaje. Sin embargo, puedes ayudarte a ti mismo con antelación, asegurándote de que tu bicicleta está en las mejores condiciones de funcionamiento antes de salir a rodar. ¿Qué significa esto?

- Asegúrate que los neumáticos estén inflados: las llantas de las bicicletas pierden aire de forma natural con el tiempo, por lo que mantenerlas a la presión óptima reducirá el riesgo de pinchazos. La presión recomendada (PSI) para tus neumáticos estará escrita en el costado. Si no estás seguro, pregunta a tu proveedor o fabricante.

- Asegúrate que los neumáticos no estén desgastados: los neumáticos son un elemento consumible e inevitablemente se desgastan y perecen. Fíjate si la parte superior de la llanta ha perdido su perfil redondo y empieza a parecer cuadrada o plana en la parte superior. También hay que estar atento a los pequeños cortes, grietas o rajaduras en el neumático. Son un indicio de que la goma ha visto días mejores. Después de todo, si parece que necesita un reemplazo, probablemente lo necesite. Los neumáticos deteriorados también suponen un peligro para la seguridad debido a la menor adherencia que ofrecen, además de ser más propensos a pinchar.

- Lleva tu bicicleta a revisión regularmente: de nada sirve tener un equipo elegante o funcional si no se mantiene bien. Una revisión general periódica significa que las piezas móviles se mantienen lubricadas, los engranajes se afinan, se comprueba el desgaste de la cadena y se aprietan todos los tornillos. Si lo haces con la suficiente regularidad, evitarás problemas y probablemente ahorrarás dinero a largo plazo.

- Mantén tu caja de herramientas abastecida: es muy importante que tengas a la mano las herramientas específicas y generales que puedas necesitar para cada uno de tus viajes. El estar preparado es perfecto para cuando llega el momento de hacerle frente a un problema y nada mejor que contar con las herramientas adecuadas, haciéndote mucho más sencillo la resolución de dicho problema.

Lo que necesitará: lo esencial

Sea cual sea la disciplina, tu kit de recambios básicos debe contener los siguientes elementos:

- Palancas de neumáticos: se utilizan para sacar los bordes de los neumáticos de la llanta. Pueden ser de plástico o de acero. Normalmente, las de plástico son las mejores (aunque no todas son de la misma calidad) y no rayan las llantas.

- Infladores de mano: busca un inflador que quepa perfectamente en tu maillot o que se adapte al tubo inferior de tu bicicleta. Algunos infladores tienen un cabezal que se adapta a las diferentes válvulas de los neumáticos.

- Cartucho de CO2: se trata de una pequeña lata de gas o "aire en una lata" que tiene suficiente aire para inflar el neumático rápidamente hasta unos 100 PSI. Los cartuchos de CO2 vienen en diferentes tamaños para adaptarse a diversas aplicaciones, siendo los tamaños más comunes 12g, 16g y 25g.

- Kit de parches: tener a la mano el tradicional kit de parches puede marcar la diferencia en tener una buena experiencia en tu viaje, o todo lo contrario. Los kits tradicionales vienen con unos cuantos parches, un pulidor y un poco de pegamento para neumáticos. Las versiones más recientes vienen con parches sin pegamento que se pueden pegar como una tirita.

- Maletas impermeables: son ideales para evitar que el teléfono y los recambios se estropeen con el agua si el cielo se abre de repente.

- Nutrición: es importante mantener los niveles de glucosa en el cerebro para que puedas concentrarte en la tarea y llegar a tu destino.

- Multiherramientas: las multiherramientas pueden contener una variedad de tamaños de llaves, cabezas de destornillador, un rompecadenas, una llave de torsión, una llave de radios y algunas incluso contienen un abridor de botellas (¿quizás para celebrar una vez que el trabajo está hecho?). Sea cual sea la herramienta que elijas, asegúrate de que sabes utilizarla. La idea de hacer una inversión de estas, es que también te animes a aprender a utilizar todas las herramientas para que estes preparado para cualquier eventualidad.

- Identificación: en el peor de los casos, que los trabajadores de los servicios de emergencia puedan identificarte si estás inconsciente o no puedes comunicarte, les ayudará a avisar a las personas adecuadas.

- Dinero en efectivo (o tarjeta de crédito): además de ser prácticos para las paradas en las panaderías, los billetes en efectivo pueden colocarse hábilmente en el interior de un neumático para cubrir una rotura o un gran agujero si has sustituido la cámara, pero el neumático sigue dañado. Este truco te sacará de apuros, pero sustituye el neumático en cuanto puedas; además, también es una buena forma de guardar dinero.

- Teléfono: Aunque sea bonito estar fuera de la red y en la naturaleza, lleva un teléfono para contactar con alguien en caso de emergencia o de misión fallida de cambio de cámara. También es útil para hacer fotos de tu recorrido (cuando estés parado, claro).

Si usas la bicicleta como medio de transporte, adicional a lo anterior, esto es lo que te recomendamos llevar

- Chaqueta ligera: nunca se sabe cuándo va a cambiar el clima. Las chaquetas de ciclismo urbano te pueden ayudar con la lluvia, te mantendrán seco y te protegerá de los charcos. Puede que quieras esperar a que pase la lluvia, ¡pero a tu jefe no le gustará esperarte!

- Calcetines de repuesto: confía en nosotros. Aunque sólo estén mojados los caminos, éstos serán tu salvación.

- Un buen candado: si todo se tuerce y tienes que llegar a tiempo, sujeta la bici a algo sustancial, pide un taxi y sigue tu camino. Trae un mecánico después. Un candado en U será lo más seguro.

Ten en cuenta para ciclismo de ruta

Los ciclistas de ruta prefieren llevar el menor peso, por lo que es posible mantener los recambios compactos y mínimos con un almacenamiento eficaz. Disponer de las herramientas adecuadas para el trabajo significa que puedes realizar una reparación de emergencia de forma rápida y eficaz, lo que te dejará menos huecos para volver al pelotón. Considere una combinación de minibomba/adaptador de CO2: esta bomba actúa como un adaptador para sus cartuchos de C02, pero también es una minibomba para proporcionar algo de aire normal. Ayudará a tu causa utilizar la minibomba para poner un poco de aire inicial en el neumático o rellenarlo si el C02 falla. La mejor parte es que es ligera y compacta, lo que significa que tienes menos que llevar.

- Multiherramienta con llave de radios: esta función de tu multiherramienta de confianza es muy útil si tus ruedas sufren un golpe en la carretera o si un radio se suelta y necesita ser ligeramente rectificado para llegar a casa.

- Geles energéticos: puede que hayas estado empujando a través de una ominosa señal de hambre y de repente, un silbido de los neumáticos te obliga a parar hasta media hora mientras tu primera cámara falla, una palanca de neumático se rompe... ya es una experiencia frustrante, así que si añades el "hambre" a la mezcla, sentirás que el mundo está en tu contra. Consigue una barrita de muesli (no nos desesperemos por los geles durante un viaje de entrenamiento) y siente que vuelves a la vida y entonces afronta la solución.

Ten en cuenta para ciclismo de montaña

- Las mochilas de hidratación: una mochila con capacidad para transportar agua en una "vejiga", bolsillos con cremallera y clips alrededor de la cadera y a través del pecho para evitar que la bolsa se balancee. No faltan opciones, pero elegir una que tenga un poco de espacio para guardar tus recambios te servirá. La otra opción son las botellas de herramientas, las mismas que puedes llevar en una bicicleta de carretera. La única desventaja es la eliminación de un bidón de agua, o las bicicletas de montaña que tienen un amortiguador trasero a veces no tienen espacio para un soporte de bidón adicional. Por último, las bolsas de sillín son una opción muy completa, siempre que estén bien sujetas y tengan espacio para todo lo necesario.

- Cadena de repuesto: las cadenas pueden romperse y puede ser un reto cuidar una bicicleta de montaña de vuelta a casa en los senderos complicados. Hoy en día, la mayoría de las bicicletas de montaña son de 10, 11 o 12 velocidades, por lo que hay que llevar un eslabón de repuesto y elegir una multiherramienta con un rompecadenas como reserva.

- Suministros de primeros auxilios: con las emociones, vienen los derrames. Con el acceso médico comprometido en el monte, un kit básico de primeros auxilios te dará una mejor oportunidad si ocurre lo peor. Limpiar la suciedad de la herida inmediatamente después de tener un accidente reducirá el riesgo de infección posterior, al igual que tener la capacidad de restringir la hemorragia o las mordeduras de animales con un vendaje básico. Es bastante fácil llevar un pequeño frasco de solución salina, una venda, una gasa y unos cuantos parches para la herida. Cualquier farmacia tendrá algo que le convenga, ¡agradécelo después!